14/4/09



“EL POETA EN LAS MANOS”

Y ahora que piensas hacer poeta herido? Vas dejando hilos de sangre sobre la tupida maleza que te esconde y te retrasa. Ellos no están más que a un kilómetro de distancia, son demasiados, vienen con armas y perros pero no te amedrentas, miras hacia atrás, aprietas el hueco que han dejado en tu costado y continuas corriendo como buscando el sol o una línea fronteriza que te salve.
Recuerdas cuando te dijeron” poeta enfermo carga tu equipaje, o mejor dicho tu pan y tu cuaderno” y todos se reían a carcajadas y te lanzaban insultos y escupitajos. Tuviste suerte en aquel tiempo, fueron bastante liviano, un poco de celda y un poco de agua fría.
Ese disparo no surgió del viento, no es bueno que te detengas en esta parte del llano, pueden verte fácilmente y ahí sí que no te perdonarían.
Date prisa, perdés demasiada sangre y estas a veinte minutos del refugio donde vas a encontrarte con algunos de tus colegas si los perros y las armas no te encuentran antes.
No puedo más…estas piernas están siendo devoradas por el cansancio y la herida, respirar me cuesta demasiado. Déjame mirar el cielo un ratito¡¡Levantate no te podes quedar acá!!Que lindo color tiene el cielo, un azul intenso…me gusta.¡Levantate mierda o queres que mi pluma te borre de un rayón! Que bien se siente la hierba un poco húmeda en el cuerpo, tranquiliza…es… como el amor.¡¡¡Basta de disparos hijos de puta!!!¡No te mueras, no te mueras! Dejame, ahí vienen sinceras las manos del viento. Si pero no te llevan solo a vos, también arrancan un pedazo de mí, también me matan un poco, quedate quedate. Tranquilo ahí vienen las manos ahí vienen las…

13/4/09

"POETA HASTA QUE MIS VISCERAS DESGARREN
LA CALIDA LUZ DE LAS LUCIERNAGAS"


“Espera demencial o congelar los átomos que nos hieren”

Acto primero:

Los lobos que cuelgan de la luna yacen boquiabiertos y aun así no pueden narrar los objetos que han devorado las hadas en los bordes del poema.

Acto segundo:

De ningún modo deben comer las libélulas el silencio que sostiene a los ojos y al amor, que allí solo se encienda una hoguera en nombre de los hombres que han tragado si pudor alguno, ausencias potenciadas y soledades en estado de alerta.

Acto tercero:

Por el bosque aletargado, serpientes de fuego como espadas tajan lo desierto del hombre dejando en sus manos un corazón de hiel, una duda y un vacío inexplicable.

10/4/09

con la incertidumbre de no saber si comeré,
con la certeza de saber que soy felíz.



Mi lengua será sobre tus senos

un Pincel

de trazos vacilantes